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viernes, 1 de agosto de 2008

Para Manolo García

Por si mañana en Gijón
le paso esta carta y le da por leerla o
por venir a darse una vuelta por aquí ¿por qué no? ;-)
***
Estimado alfarero:
¡GRACIAS!
Gracias por este disco,
por todas las canciones,
por todas las palabras,
por lo que dices y lo que regalas en él.
Mil verdades te habrán dicho,
porque mil mensajes para miles de seres está creado.
Cuando supe del título ya sentí (cómo no, como tanta gente, imagino), que lo habías hecho para mi, y al escucharlo no tuve ya la más mínima duda de que así fue. Como habrán sentido esos miles de seres que te beben.

No te voy a contar por qué lo siento de este modo (hay tantas historias detrás de cada frase tuya...), ni porque ya escribiera mi particular canto a la lluvia en mi humilde blog el pasado 13 de abril, la misma que empapó mis salidas a correr entre bosques de pinos y caminos de barro, ni porque viese mi nombre tatuado en uno de los videos que hiciste...

detalles nimios comparado a todas las letras que sin apenas conocerte me han llenado el alma de alegría, de amor y de vida.
¡Gracias!
Mil gracias por compartir tanto arte, tanta entrega,
tanto don que regalas y haces que tus canciones sean "de todos".
Mil cuentos te escribiría para los mil mensajes que transmites en cada verso que rebosa tu generosa entrega.
Callados esperan en esa silla de parar las prisas tuya,
entre vaivén y vaivén
y el batir de las olas
sobre el oscuro abismo en que nos meces...
Pero hoy sólo me atrevo a cantar contigo en las fiestas de los conciertos que nos brindas, y a saborear cada verso luego como azúcar caramelo...
Sólo me atrevo a mirarte y a gritarte ¡guapo!, pues bello eres en tu arte, bello en tu poesía y bello en tu espíritu (aparte de ¡guapo, guapo, y guapo!)
Y, por supuesto, humildemente me atrevo a hacer mío este disco y a darte otra vez las GRACIAS por habérnoslo regalado en un momento de luz que ha iluminado el gris y el arco iris para hacer brotar colores iridiscentes en los amaneceres tras tus conciertos.
¡Gracias, alfarero!
¡No mueras nunca!
Y da siempre alimento a tu arte
para que viva siempre y se transforme.
Tu energía se mueve y nos mueve.
Tu alegría contagia y enamora.
Un abrazo grande y fuerte.